

Las estrategias de rituales que pudieran derivarse de los objetos hallados no concuerdan con nada conocido hasta la fecha. Diferentes científicos de tendencias paralelas y también antagónicas coinciden en afirmar que se trataba de rituales pasivos, en los que los objetos aportados a ellos se utizaban muy posiblemente para identificar a los participantes, a modo de carnet de identidad objetual, y no como símbolos evidentes de intenciones, actitudes y/o divinidades. Lo que demuestra que dichos ritos debían de encontrarse en una fase muy primitiva, preliminar en el tiempo, muy próxima al establecimiento de bases y liturgias, aunque sin una finalidad muy clara, aparte de la pura necesidad de llevarlos a cabo.






